ESCUDO DE CURUZU CUATIA

HERÁLDICA

Forma: oval, cortado con filete grueso de sinople como bordura.

Trae en el primer cuartel sobre tapiz de azur en palo una cruz romana de gules un sol naciente de oro con siete rayos rectos cortos alternados con seis flamígeros cortos.

Trae en el segundo cuartel sobre tapiz de plata cuartelado en aspa por dos franjas de su color cargados con líneas de sable y movientes de ambos cantones de la punta se adelgazan hasta los flancos opuestos. En el cuartel superior de la partición un pilar de su color con una imagen de una Virgen con el Niño en brazos de azur celeste y plata y a sus lados 2 árboles foliados de sinople y tronco de su color. En ambos cuarteles laterales dos árboles foliados de sinople y tronco de su color y en el cuartel de la punta un árbol foliado de sinople y tronco de su color del doble de tamaño.

Ornamentos: como panoplia de armas dos lanzas tacuaras de su color y puntas de plata que se cruzan en sotuer por detrás del blasón, como timbre entre las puntas de las lanzas una divisa de oro pergaminada con rollos hacia adentro con un lema toponímico de letras ariales de sable. Una rama de ceibo foliado de sinople florido de gules a diestra y una rama de laurel foliada de sinople frutado de gules a siniestra, ambas con tallos de su color que se cruzan en la punta y unidas por una cinta en moño simple terciada en faja de azur celeste y plata extremos en ángulo

SIMBOLOGÍA

En su escudo de armas, Curuzú Cuatiá refleja su tradición, su prosapia y su historia.

Los colores azul y blanco de las particiones y el lazo inferior muestran su pertenencia a la nación. En la parte superior una cruz en rojo, que significa, valentía, intrepidez, victoria con sangre. En el plano inferior nueve algarrobos, existentes en el lugar desde épocas remotas. El gran sol significa el momento en que surge a la vida urbana, definitivamente organizada y regularizada en su fundación por el Gral. Manuel Belgrano, la ciudad de Ntra. Sra. del Pilar de Curuzú Cuatiá. En el campo inferior dos caminos se cruzan y en el ángulo superior aparece un pilar con un hueco y sobre él la Virgencita del Pilar ante la cual oficiara Misa el Capellán del Ejército del Norte el 16 de noviembre de 1810. Orla el escudo ramas de ceibo y laurel que representan el sentimiento nacional siempre presente en este pueblo las gestas heroicas de la Patria. Dos lanzas correntinas de tacuaras y chuzas lo sostienen y simbolizan las armas de la época en que se luchaba por la Independencia.